Por Una Vez Perderé Esa Madurez Que Tanto Me Caracteriza Y Volveré A Ser Una Niña Perdida.

Cuanto más caos tengo en mi vida, más ordenada parece que está. (C.Winchester)

No puedo soñar

Porque te tengo en mi mente

Te llamo

Cuando no quiero ni verte.

Escucha el sonido

Que emiten mis manos

Rasgando el viento

Que corre a mi lado

Lluvia que moja,

La noche estrellada,

Que cae por mi rostro

En cada madrugada.

Pájaro negro

Que anuncia que acaba

Lágrimas que brotan

Hasta mi almohada

(C.Winchester)

A veces cuando me miro en el espejo todavía puedo ver un atisbo de la niña que fui. Una niña dulce, amable, solitaria por obligación, incomprendida,... No voy a negar que la añoro, y aunque queden rasgos de esa niña en mi, no deseo que vuelva. Es triste, si, pero ahora soy más fuerte y más valiente, si esa niña volviera no podría soportar todo lo que he soportado. Así que gracias a esa niña, soy la persona que soy. (C.Winchester)

Odio a las personas que piensan que quienes estudian y no reciben un sueldo es como si no trabajaran y tuvieran todo el tiempo del mundo. Pues perdonad que os diga que nuestro trabajo no está valorado y que hacemos más horas que algunos trabajadores con sueldo, y que somos de los poco que salimos de nuestro horario laboral y nos llevamos el trabajo a casa. (C.Winchester)

Estoy harta de las cadenas, esas que se hacen llamar familia. Familia que supuestamente te protege, pero es la primera en asestarte los golpes.

Esa a la que no le cuentas el infierno por el que pasas día tras día y cómo te va consumiendo poco a poco para no preocuparla. Cómo aprendes a pasar por la vida como un mero observador.

Esa familia te crea inseguridades que antes no tenías. Tener miedo a querer a alguien y que la que se hace llamar tu familia no lo apruebe. Tener miedo a conocer a alguien y cuestionar si esos sentimientos son reales. Tener miedo a amar y cuestionarte si está bien sentir eso. Tener miedo a los hombres, porque el modelo que has tenido no es el indicado.

Esa que se hace llamar familia muchas veces no simboliza el amor, sino la destrucción. Que una persona que te diga que si no fuera por ti, yo no tendría esta vida. Es cruel saber que si yo no hubiera nacido, esas dos personas no estarían juntos. Saber que si no hubiera nacido todo sería diferente, sería mejor.

(C.Winchester)

Lo más difícil en este mundo es saber que la persona que amas lo está pasando mal y sentirse impotente por no saber como ayudadla. Ver como la esperanza cada vez es menos y que tu vida está ligada a la de esa persona. (C.Winchester)

Estoy harta de palabras vacías y sonrisas forzadas. (C.Winchester)

Imagínate la siguiente situación: Una persona ama a otra, pero cree que la persona no la ama. Bastaría con preguntar, ¿No? Pero, a esto hay que sumarle las inseguridades de esa persona, por lo que lo de preguntar queda descartado. Vale, la incertidumbre la va matando poco. Lo único que puede darle algún indicio de si la ama es la actitud que tiene esa personas. Pero, también la hace dudar, ya que a veces la busca y otras veces se aleja. Lo que incrementa esa incertidumbre.

Difícil, ¿no? Pues, imagínate que fuera real. Que las personas de esa situación fuéramos tú y yo.

Soñé con una vida diferente, con un mundo distinto, donde el amor no fuera un asunto pendiente y las miradas no se perdieran en el infinito.

Soñé con metáforas que nunca entendí, con luces y sombras. Las sombras me atraían y las luces me deslumbraban.

Tuve pesadillas que no hacían daño y sueños reales que fueron mortales. Bailé con sombras destructoras que mi mente consiguió derrotar.

Dejé de soñar. Las heridas volvieron a sangrar, pero no dolieron igual.

(C.Winchester)