Please don't go, I'll eat you whole I love you so, I love you so, I love you so
#Goosebumps It reminds me of Her beauty, her fight and Her flames. She's fire, there's no other way I'd rather die, than burnt in her arms. I love her. Forever
“Be careful, you are not in Wonderland.”
Kill Your Darlings (2013) dir. John Korkidas
Russian matchbook labels.
"It's well known, like all good fruit the balance of life is in the ripe and ruin"
What's the limit of self-indulgence and self-compassion?
Sometimes I think of the old days
Those where your eyes were nothing more than an unsolved mystery
Back when your mind was Inaccessible and your heart refused to give in
What have I done? What have I done? To you.
I'm an abyss, everything comes in but nothing ever comes back out
I'll suck your soul and crash it into little pieces of lost hopes and big dreams
Will I ever be enough?
Am I dragging you into this unbearable insignificance?
Should I set you free from the curse of ordinary and mundane?
There in the crowd, we're just a number. Only that and nothing more. No one will jump or shout or cry to our command.
And that's the awful truth, maybe we're only meant to see the life from afar. No spotlights. No curtain call.
The guilt always comes creeping in. I'm secretly so happy in this eternal nothingness. My heart rest warm in your pain.
SOBRE LOS FINALES
Hoy mi amanecer es solitario. En lo que había una vida entrelazada, hoy queda solo vacío. Su existencia se esfuma de mis horas y mi mente lucha con fuerza para mantenerse en pie, porque aunque parezca extraña, esa disrupcion abrupta de una realidad, la vida sigue. El cielo no es otro, si no el de todos los días, el tráfico, el viento permanecen intactos, como cualquier otro día. Las horas siguen sin inmutarse, la gente de siempre, las rutinas, todo sigue, nada cambia. Una punzada leve es el único testigo de los años que ya fueron, la nostalgia tan paralizante de los buenos días que ya no vendrán más. Memorias recreadas una y otra vez, en la imperfeccion de una mente humana que inventa para no olvidar.
Volverse un extraño, recordar la insignificancia de la humanidad en sí, los efímeros pasos en la vida de otros. No somos más que una suave brisa, una sombra del tiempo de quienes más nos amaron.
Recordar las pequeñas nimiedades, que eran sin saber los días más felices. Permanecer en silencio sin la necesidad de llenar el vacío con alguna conversación superflua, cantar al unísono mientras se diluyen los minutos en el tráfico de la ciudad, descansar en Paz y felicidad absoluta. Esos son las verdaderas alegrias.
Hoy se esfuma la posibilidad de futuros infinitos, toda la música, la vida, los días que ya nunca serán. No hay más anhelos, ni esfuerzos. Hoy hacemos tregua con el deseo, levantamos en alto la bandera blanca, para decir que nos rendimos. Ni esta ni ninguna guerra es infinita. Sólo el fin es seguro y hoy nos abraza con fuerza.