Hay palabras que son tan pequeñas pero que te rompen en mil pedazos.
Azul
No hay “después”. Porque después el té se enfría, después el interés se pierde, después el día se vuelve noche, después la gente crece, después la gente envejece, después la vida se termina; y uno después se arrepiente por no haberlo hecho antes, cuando tuvo la oportunidad.
Contando ovejas…
rebekah campbell