Me Perdí En El Mundo De Un Cariño Que Creía Incondicional,

Me perdí en el mundo de un cariño que creía incondicional,

Creí que el amor era aguantar todo sobre todo, aún cuando iba más allá de mi estabilidad.

No había día que no llorara por sentirme insuficiente ante los ojos de la persona que lo era todo para mí.

No había día en el que me preguntara qué tenían las demás que yo no y por lo cual las prefirieran antes que a mí.

Dejé de ser yo por tener contenta a una persona que hacía lo mínimo por verme sonreír.

Aprendí a fingir que no me importaba lo que me faltaba y callarme cosas que eran emocionantes.

Dejé de hacer las cosas que me gustaban porque no quería reclamos mucho menos peleas.

Me alejé de gente por calmar los celos de una persona que me reprochaba hasta por el aire que respiraba.

Me volví insegura, me convertí en una persona que odiaba su reflejo y llegó a maldecir su existencia.

Me convertí en un ser que sonreía por compromiso y lloraba cuando las luces se apagaban.

Hasta que un día, porque siempre hay un día que lo cambia todo, decidí que todo ese llanto era suficiente, y decidí estar bien por mi, para mí.

Cuando aprendí a valorar lo que veía la otra persona se hizo chiquita.

Cuando él se fue de mi vida decidí enfocarme en mi.

Brillé.

No fue sencillo, me costó demasiado volver a verme en un espejo sin tener repugnancia.

Por fin pude amar lo que hacía y decía.

Comencé a hacer lo que me gustaba, a vestirme como yo quería, a hablar con quiénes me mostraban su amistad.

Y luego llegó él.

Un ser de infinita luz que se metió en vida de a poquito,

Con cosas sencillas y palabras precisas.

Él brilla por si solo,

Él existe y lo hace notar.

Llegó a ser parte de esta etapa,

Dónde aprendo de la vida, de las decisiones y momentos.

Él me ayuda a ser alguien que está presente.

Y aunque muchos pueden decir que nadie complementa a otro,

Lo cierto es que ayudan a ser mejores.

He tenido cambios favorables,

Las sonrisas perduran y el llanto casi desaparece,

Los días son buenos y su presencia es agradable.

Me prioricé,

Ahora quiero ser,

Quiero existir y demostrarme que de las tormentas brotan los mejores paisajes.